|  

El paisaje urbano de China en la última década ha tenido una transformación enorme. Diversos sitios patrimoniales y grandes áreas de viviendas tradicionales han sido transformados con altas torres que simbolizan la riqueza, desarrollo y poder.

282 No me gusta11

Se prevé que tal vez cientos de millones de personas emigren de las áreas rurales a las ciudades para el año 2020 como parte del ambicioso programa de urbanización del gobierno chino, por lo que la cantidad de rascacielos para alojarlas seguirá creciendo, pero no de forma imaginativa.

En este contexto, el arquitecto Ma Yansong ha construido una poética cartera de edificios que se adhieren a una filosofía de diseño que hace hincapié en la naturaleza en el núcleo de la planificación urbana.

Ejemplo de ello es Fake Hills (realizada en 2015), en Beihai, China. Situado en la costa del sur, este vasto complejo residencial combina una estructura de gran altura y una tipología ondulada, con el propósito de presentar una solución distinta pero de alta densidad.

Los edificios utilitarios de viviendas y oficinas son el sello distintivo de las florecientes ciudades chinas. Las megaciudades como Beijing ya están invadidas por ellos, creando paisajes urbanos que se sienten "artificiales", como observa Yansong.

"Creo que en nuestras ciudades modernas hay muchas cajas; muchas líneas rectas. A menudo tienen que ver con eficiencia, función y estructura. No hay naturaleza. A las personas les encanta acercarse a la naturaleza, por lo que necesitamos crear entornos que permitan tener estas conexiones emocionales", afirma respecto a su obra.

Emoción en el diseño

Ma, fundador del estudio de renombre mundial MAD Architects, ha edificado un concepto de edificios adheridos a su filosofía "ciudad Shanshui". Shanshui se traduce como "montaña, agua" y el término abarca la integración de formas orgánicas y principios de diseño oriental, haciendo hincapié en la naturaleza en el núcleo de la planificación urbana.

Las nuevas fotos de su proyecto Huangshan Mountain Village, en la provincia china de Anhui, que exhiben una gama de ondulados complejos de apartamentos, en sintonía con las terrazas de piedra caliza cercanas a Huangshan ("Montaña Amarilla").

En las ciudades, Ma ha trastocado las acostumbradas líneas "sin emociones" y las "curvas industriales" para crear estructuras influenciadas por pinturas clásicas chinas, las curvas extremas de las montañas, las suaves líneas del desierto e incluso (en el caso de los voluptuosos rascacielos Absolute Towers en Ontario, apodados Marilyn) el cuerpo humano.

"En las ciudades tradicionales como Beijing, Nanjing y Hangzhou, la naturaleza era una parte muy importante de la planificación urbana. No solo como paisaje, sino también como parte de la vida cotidiana. Es un hermoso jardín, digamos. Pero entonces tenían baja densidad (poblacional)", afirma Ma en un despacho de Expansión.