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Ya no es necesario comprar todo el inmueble para ponerlo en renta, se pueden adquirir partes de esa propiedad y recibir ingresos.

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Algunos de los beneficios de contar con buenas opciones de inversión son la independencia financiera y la buena gestión de finanzas. A lo largo de la historia, uno de los sectores que ofrece mayor potencial de inversión es el inmobiliario, el cual anteriormente requería de grandes cantidades de capital para poder iniciar.

No obstante, hoy en día existen diferentes opciones tan flexibles y accesibles que hacen que prácticamente cualquier persona pueda convertirse en inversionista. No es casualidad que en el sector inmobiliario existan nuevos modelos de negocios.

 

“Cuando hablamos de inversiones, las personas suelen desconocer que si invierten en lugar de comprar un inmueble podrían llegar más rápido a una meta financiera”, expresó Alberto Martínez, CEO de DIAM.

 

Por ejemplo, al adquirir un inmueble con deuda se tardarían 20 años en pagarlo, pero si los mismos esfuerzos los colocan en un vehículo de inversión, podrían alcanzar la compra de ese inmueble en cinco años, solo que la gente lo desconoce. Nosotros queremos ser un aliado capaz de entregar a las personas el poder de construir su futuro, con una inversión a la vez.

El CEO señaló que los principales interesados en invertir en bienes inmuebles son personas con una edad promedio de 40 años, que buscan generar ingresos con alguna propiedad, ya que están interesados en tener algo para heredar a sus hijos o contar con ingresos suficientes que les permitan tener una buena calidad de vida durante su retiro.

 

 

Retos de las nuevas formas de inversión

De acuerdo con el experto, la falta de información y acompañamiento en temas financieros es uno de los principales retos para el sector, por lo que hay que trabajar en asesorar a los clientes de forma previa al proyecto inmobiliario en el que decidan invertir.

Se puede enseñar a la gente que para ejecutar un proyecto inmobiliario no necesita grandes sumas de dinero, sino tener un plan bien diseñado donde se micro fragmente el proceso, “por ejemplo, no necesitas comprar un terreno si puedes incluir en el proyecto al dueño de un predio; puedes sumar al inversionista o al abogado y así sucesivamente, primero con un anteproyecto y luego con perfiles más avanzados conforme va creciendo tu idea”, enfatizó Alberto Martínez.

Ya no es necesario comprar todo el inmueble, como antes, para luego ponerlo en renta y obtener ganancias; actualmente puedes adquirir solo una parte de esa propiedad y recibir ingresos equivalentes, lo cual te permite diversificar tu dinero. En lugar de comprar una propiedad ahora distribuyes el recurso en varios inmuebles y obtienes ingresos en cada uno de ellos”, precisó.

 

Invertir en vivienda seguirá siendo atractivo durante los próximos años, agregó el experto, “no solo porque existe un déficit a nivel nacional que el sector debe cubrir; sino porque los modelos de consumo de la gente también han cambiado, y sus necesidades de un hogar son diferentes en relación a las grandes familias que existían hace algunas décadas”, concluyó.