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Si se logra dar certidumbre a la inversión extranjera, podría darse una década de éxito para México liderada por el nearshoring.

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Actualmente la fábrica del mundo se ubica en la República Popular China, al albergar la planta productiva de multinacionales de todo el mundo y que representan el 30% de la producción global.

Sin embargo, esto está cambiando debido a las tensiones comerciales que existen con Estados Unidos (EU) y por los problemas que vislumbró la pandemia en las cadenas logísticas, al replantear riesgos para las multinacionales a nivel geopolítico y en su reputación.

 

Por eso, más empresas buscan trasladar parte de su producción fuera de China a nuevos destinos. Este hecho ha marcado una nueva tendencia al buscar reducir sus riesgos a través del nearshoring.

 

Bajo este panorama, las instituciones financieras no bancarias (Sofomes) consideran que, de darle certidumbre a la inversión extranjera, ésta podría ser la década de éxito para México.

La actual integración de suministros con EU y Canadá gracias al Tratado de Libre Comercio (T-Mec) sumado a los costos laborales que en algunos casos son mejores que los del país asiático, mano de obra capacitada y un bono de edad promedio de la población de México, convierten al país en el destino ideal para el movimiento de multinacionales que buscan sacar parte de su producción de Asia.

De acuerdo con el gobierno mexicano, más de 400 compañías actualmente han mostrado interés en trasladar su producción de Asia a México, aunado a que más del 58% de la producción industrial de EU depende de la proveeduría mexicana.

 

 

Por todo lo anterior, la financiera Serfimex Capital ve una oportunidad para inyectar liquidez a las empresas en proveeduría y manufactura en México, las cuales pueden reducir gastos de envío, reducir tiempos en la cadena de suministros, tener un menor impacto por aranceles y respeto a la propiedad intelectual, al instalar nuevas plantas y parques industriales en el norte, centro y el Bajío del territorio mexicano.

"Consideramos que el nearshoring beneficiará principalmente a firmas de manufactura, aeroespacial, automotriz, médica, logística y electrónicos en todo el país. La financiera juega ya un papel relevante en el apoyo a las empresas mexicanas que se están beneficiando de la llegada de nuevas inversiones al brindarles líneas de financiamiento en arrendamiento puro y crédito simple ante su necesidad para expandirse y crecer. Durante el 2023 estimamos un crecimiento en nuestra cartera del 20%, indicó Borja Rodríguez López-Palacios, director de negocios de la Sofom.

 

Así, las instituciones financieras no bancarias ven esta década como un espacio para generar oportunidades de negocios al facilitar mayor acceso a capitales a empresas que inviertan en equipo y recursos, fortaleciendo así la cadena de suministro bajo el despertar del nearshoring.