Cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) revelaron que los precios de las materias primas de la construcción residencial acumularon un incremento a nivel nacional de 29.36% desde marzo de 2020 –previo al inicio de la pandemia– a diciembre de 2022; también ha habido insumos que han duplicado su precio, en particular, los productos metálicos son los que muestran la mayor volatilidad.
En contraste, la inflación general, medida por el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) acumuló, en el mismo periodo anteriormente mencionado, un incremento de 18.38% es decir, cerca de la mitad de lo que acumuló en el mismo periodo los materiales para la construcción residencial.
Los materiales para la construcción han crecido al doble que la inflación general.
De enero a agosto de 2022, la inflación general reportó una tasa anual del 8.7%, la más alta desde diciembre del 2000, pero al cierre de todo el año finalizó con un incremento de 7.82%, luego de moderar su desempeño en el último.
Como comparativo, en estos ocho primeros meses del año pasado, los insumos para la construcción, medidos a través de los precios productos, repuntaron 13.59% a tasa anual. En particular, los insumos para la construcción residencial avanzaron en el mismo periodo 12.28%; sin embargo, también se observó una corrección en los meses finales del año y al final el incremento acumulado fue de 8.56% en los materiales para la construcción.
Analistas del sector privado coinciden en que buena parte de las presiones que se reflejan en las materias primas del sector, obedecen a factores internacionales, donde muchos de esos productos son considerados commodities.
Los insumos para la construcción repuntaron 13.59% a tasa anual.
Productos metálicos, los más volátiles
De acuerdo con el informe Situación Inmobiliaria de BBVA, “desde el cierre de actividades generalizada en todo el mundo, en el que la construcción no fue considerada como actividad esencial hasta etapas posteriores de la pandemia, el aumento en el costo de los fletes marítimos, la escasez de contenedores, el alza generalizada en las materias primas y el desabastecimiento de algunos productos”, han repercutido en los precios de las materias primas del sector construcción.
Los mayores costos de construcción llegan a afectar los planes de los desarrolladores.
Dicho análisis agregó que “en la última década el INPP (de la construcción) ha mostrado varios ciclos de subidas y bajadas, cada uno relacionado con diferentes causas como en 2009-2013, la desaceleración en la construcción de vivienda y la caída en infraestructura alcanzando tasas negativas de 1.3%, mientras que en el periodo de 2014 a 2017 el aumento de precios, con un máximo de 13.3% en abril de 2017, estuvo relacionado con los grandes presupuestos de subsidios para vivienda y las nuevas formas de financiamiento para inmuebles no residenciales. Por último, en 2018 el crecimiento del INPP fue producto de los cambios en la industria del cemento, cuando había alcanzado hasta 10.5% en septiembre de 2018”.
La mayor volatilidad, sin embargo, la presentan los productos metálicos. Por ejemplo, de marzo de 2020 a agosto de 2022 el alambrón acumuló un incremento de 80.67%, la varilla corrugada de 70.67%, las estructuras reportaron un avance de 59.44%, en los perfiles de hierro y acero al repunte acumulado fue de 51.64% y en el alambrón de hierro y acero al ajuste fue de 40.58%, de acuerdo con información del Inegi.
Sin embargo, para el cierre de año se había observado correcciones y el alambrón acumulaba de marzo de 2020 a diciembre de 2022 un repunte acumulado de 52.9%, la varilla corrugada acumulada 49.56%, en las estructuras no bajó del 50% (51.98%), los perfiles de hierro y acero el avance fue de 34.97% y los alambres de fierro y acero 30.08%, entre otros ajustes importantes. En contraste, otros materiales de uso intensivo como las pinturas y el cemento, reportan en el mismo periodo de comparación incrementos de 33.04 y 28.11%, respectivamente; o bien los ladrillos acumularon aumentos de precios de 14.11 por ciento.
Como se puede observar, el desempeño de los diversos materiales para la construcción ha sido diferenciado, destacando más las presiones en los productos metálicos; sin embargo, la suma de todos ello definitivamente ha repercutido sensiblemente en el costo de la edificación.
Productos metálicos presentan mayor volatilidad.
Tormenta perfecta
En este sentido, tanto factores geopolíticos y económicos locales y globales han creado la “tormenta perfecta” que ha supuesto tiempos desafiantes para la industria.
“Otros temas que también han impactado son los costos de energía, que vinieron a agravarse con la guerra entre Rusia y Ucrania. Todos los energéticos, como el gas y petróleo, en los últimos meses hemos visto que han subido, no solo por la inflación generalizada que vivimos, sino por el conflicto bélico en Europa”, explicó Alberto Vázquez, socio líder para la práctica del sector inmobiliario, construcción e infraestructura en KPMG.
Mencionó que las vigas, acero y varilla requieren una cantidad importante de energía para poderlas procesar. Además, todo el tema de logística y transporte se vio afectado por los problemas en las cadenas de suministro, lo cual terminó por afectar los costos de producción, principalmente en los materiales metálicos.
“Los costos de construcción, principalmente, son productos metálicos como viga, varilla, acero, concreto y cemento. Simplemente estos productos representan poco más del 50% de producción de cualquier activo u obra”, puntualizó Alberto Vázquez.
Los costos de los materiales repercuten en el costo de la edificación.
Cementos Mexicanos (Cemex), uno de los grandes productores de cementos en el mundo, anunció en su momento que seguiría ajustando los precios de sus productos en el segundo semestre de 2022.
En aquellos momentos del año pasado, los directivos de la cementera declararon: “Estamos en el proceso de implementar aumentos de precios adicionales en toda nuestra cartera”.
La administración indicó que los precios consolidados subieron dos dígitos en el año 2022, en promedio entre un 11 y un 26%, prácticamente en todas las regiones donde opera, como Estados Unidos, Europa y Asia.
Fernando González, director general de la cementera, explicó que las presiones inflacionarias se empezaron a observar Fernando González, director general de la cementera, la segunda mitad del 2021, lo cual se reflejó principalmente en el aumento en los precios de la energía, lo cual impactó negativamente la producción del cemento.
El impacto de los precios ha sido global, no solo de México.
Por su parte, Enrique Escalante, director general de GCC (antes Grupo Cementos de Chihuahua), explicó que los grandes desafíos en la producción de cemento han sido los altos niveles de inflación, junto con aumentos en las tasas de interés, presiones en la cadena de suministro y escasez de mano de obra, así como la pandemia que sigue presente y la guerra entre Rusia y Ucrania.
El especialista de KPMG resaltó que en un ambiente inflacionario alto de 8.7% se esperaría que el precio de los insumos de la construcción siga aumentando al doble que la inflación general.
“Aunque se estima que este 2023 los incrementos en los materiales comenzarán a bajar, porque se espera que en el mediano plazo la inflación también baje”, proyectó el socio líder para la práctica del sector inmobiliario, construcción e infraestructura en KPMG.
Agregó que en la medida en que sigan altos los precios de los insumos de la construcción, seguirán trasladándose los efectos se verán reflejados en el encarecimiento del precio final de las obras o proyectos, tales como las viviendas, proyectos inmobiliarios (centros comerciales, naves industriales, oficinas) y obras de infraestructura.
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Foto: PHOTO 2023 / PEXELS / EDIFICANDOTE / TRANSFORMED / SOPHON NAWIT / MBIBLOG