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El Banco de México ha mantenido desde marzo de 2024 una tendencia de baja en su tasa de referencia, propiciando que desde un nivel de 11.25% en marzo de 2024 se ajuste hasta 7.0% al cierre de 2025; sin embargo, para 2026 se moderará la corrección a la baja.

El gasto de los hogares en México mostró señales de desaceleración durante noviembre, confirmando un cierre de año más cauteloso en el consumo privado, de acuerdo con el más reciente Indicador de Consumo Big Data de BBVA Research (ICBD).

Las fiestas decembrinas 2025 podrían generar una derrama económica de 608 mil millones de pesos en México, impulsada por el consumo familiar, el turismo nacional y el comercio, en un contexto de gasto más planeado y responsable.

El “superpeso” no solo regresó, sino que podría convertirse en un factor de estabilidad macroeconómica en 2026, al mitigar presiones inflacionarias en un entorno global todavía marcado por la incertidumbre y la reconfiguración de los flujos financieros internacionales.

La economía de México finalizará 2025 con un moderado crecimiento y enfrenta un 2026 con una mejora de expectativas para el Producto Interno Bruto (PIB), pero que seguirá teniendo un desempeño por debajo del promedio histórico.