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Muebles de playa y exteriores.
Materiales, gustos, duración y cuidados

LOS DESTINOS DE PLAYA MEXICANOS, EN CUANTO A CASAS DE DESCANSO O RESIDENCIAS PERMANENTES, HA IDO EN AUMENTO, POR LO CUAL LOS MUEBLES Y ACCESORIOS DE INTERIORES Y EXTERIORES TAMBIÉN HAN INCREMENTADO SU DEMANDA. POR ELLO ES UN MERCADO QUE ESTÁ DESARROLLÁNDOSE Y CUYA EVOLUCIÓN ES CONTINUA.

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Poder elegir entre una mesa de madera, de vidrio, de plástico o de latón es una posibilidad gracias a la gran variedad de materiales que encontramos en el mercado y a la evolución de los muebles de playa o jardín que viene desde tiempos antiguos. Durante la colonización, que se dio en todo el mundo, los europeos encontraron toda una gama de materiales provenientes de otros continentes (asiático, africano o americano), de donde rescataron las maderas que tenían posibilidades de uso bajo el intemperie y se creó una tradición de muebles para exterior.

Por tradición, los materiales más utilizados para la construcción de muebles son los naturales, como la madera, que a últimas fechas es el más difícil de conseguir por la cuestión ecológica. “Ha habido una sobreexplotación de ciertas maderas, en algunos casos se han podido recuperar por las plantaciones que hay pero son existencias limitadas, y hay que cubrir tiempos y costos altos para tenerlas”, opinó Louis Poiré, director general de Moda in Casa.

Comentó que hace varias generaciones

Eran abundantes ciertos tipos de maderas, pero ahora, como los espesores y los diámetros de los troncos son más reducidos, porque se han talado mucho los bosques, se construyen menos cosas a costos más altos. Por excelencia, la teca es el material favorito para los fabricantes de muebles de playa, por lo que cada vez hay menos en existencia. “Debido a que la teca es una madera tropical muy cerrada, no absorbe la humedad y su tiempo de duración es de 30 o 40 años, dependiendo el mantenimiento que se le dé, es un recurso natural que se está acabando y por ende es muy caro.

Existen otras opciones de maderas tropicales, cuyo costo es menor pero su duración es de dos años aproximadamente”, comentó Genaro Guerrero, presidente de Mobles & Architetture. NO TODO ES PARA EXTERIORES Materiales como el bejuco o mimbre, que son también maderas naturales, no son para exteriores, coincidieron los entrevistados, son para terrazas cubiertas y no para intemperie, porque se echan a perder al humedecerse, se pudren. En un esfuerzo por cuidar los recursos  naturales se está redireccionando la investigación hacia materiales sintéticos, cierto tipo de plásticos, polipropilenos, nylons y metales con recubrimientos especiales. En otras palabras, la industria química está muy involucrada en esa dirección.

 

“Desde hace un año realizamos investigaciones en diferentes áreas en lo concerniente a materiales, que van desde el rescate de ciertas maderas nacionales hasta el rescate de maderas tradicionales como la teca, de países como Indonesia y Filipinas, y la estamos mezclando con materiales contemporáneos, como el acero inoxidable”, expresó el director de Moda in Casa. Poiré explicó que les interesa esta investigación porque los muebles que se usan en Europa no necesariamente son los adecuados para México. “En el Viejo Continente tienen características peculiares, en cuanto al tipo de sol que reciben, el uso que se les da es diferente y generalmente duran uno o dos meses en el exterior, debido a las condiciones climáticas y a lo corto de su verano. En cambio, en México usamos los muebles para exteriores todo el año, y el contenido de salinidad es de los más altos del mundo, por lo cual los materiales tienen que tener otras especificaciones”. Agregó que, desde hace tiempo desarrollan, En colaboración con algunos fabricantes, fibras especiales que tengan la resistencia adecuada tanto al uso, lavado y a las condiciones particulares de las playas mexicanas. Además, colaboran con personas en Bélgica que han desarrollado cierto tipo de aceros inoxidables resistentes realmente a la oxidación. Para los que les gusta el plástico, hay algunos de última generación muy resistentes, que pueden ser utilizados de una manera inyectada, moldeada o tejida en muebles de exterior, y se comprueba que hay una fuerte tendencia hacia esto.

 

En cuanto a telas, debido a su uso rudo al recubrir los camastros, sillones y demás muebles, deben tener un alto grado de solidez y resistencia al sol, a los agentes de salinidad y de lavado, y a los agentes químicos que pudieran afectarlos. La gran diferencia de que un mueble pueda durar seis meses, un año, cinco o 10 años es la investigación que traen detrás, como por ejemplo los rellenos de los camastros, los cuales se deterioran rápidamente por la exposición al sol, se van desbaratando y terminan por deshacerse. Esto es algo que no se toma en cuenta, son cosas que normalmente no se ven a la hora de elegir un mueble, pero que de alguna manera sí se reflejan en el precio.

Nada como lo natural

Ya sea estilo clásico o contemporáneo, lo que más gusta en muebles de exterior es la madera, natural y original. “Lo más bonito son los materiales naturales, son los más agradables al tacto, a la vista y en todo. En pocas palabras, no hay nada como lo natural y original”, opinó Guerrero. Pero hay que cuidarse de los estafadores que, al ver como todo el mundo prefiere la teca, se aprovechan y ofrecen falsificaciones. Los entrevistados expresaron que para poder saber qué es original, la compañía que fabrica muebles de ese material debe dar una garantía o certificado de autenticidad.

De acuerdo con Marisabel Gómez Vázquez, presidenta de Arquitectura de Interiores, lo más práctico en muebles de lo más práctico, lineal y funcional”, expresó la diseñadora. Lo que no se debe de usar en exteriores, prosiguió, son cosas delicadas, elementos de fierro que no estén bien protegidos, telas de algodón que van a encoger, aunque hay algodones sanforizados y muchas mezclas que ya están preparadas para la humedad o resequedad.

 

En opinión del presidente de Mobles & Architetture, alrededor de una alberca se puede utilizar teca, madera con aluminio o con otras fibras de plástico, que aguantan igual la humedad y salinidad de una playa, si están a bordo de un yate o en una terraza de Valle de Bravo. A su vez, Poiré comentó que en muebles de madera hay que asegurarse de que la construcción sea robusta, con tipos de uniones especiales, con tornillos de acero inoxidable, el tipo de uniones que permita que la madera se mueva, se contraiga o se expanda para que no se quiebre o rompa. “Por el sol que decolora los materiales y los deteriora, o bien la salinidad del mar que los oxida y acaba rompiéndolos, sin olvidar el uso cotidiano al que son expuestos (comida que les cae, cremas solares o el sudor), el uso de los muebles de exteriores es rudo, sobre todo en el trópico mexicano”, señaló Poiré.

 

NO ES LO MISMO UNA CASA QUE UN HOTEL

Si bien elegir el material y el diseño adecuado para un mueble de playa es importante, también lo es saber que existe gran diferencia entre un mueble para casa habitación o para hotel. “El uso es completamente diferente. En un hotel el uso es industrial, por así decirlo, y en una casa es residencial. En el hotel son los empleados los que manejan los muebles, gente que no tiene tanto cuidado con las cosas, entonces tiene que ser algo más resistente, como el acero inoxidable, el plástico, incluso madera, pero depende del diseño”, detalló Guerrero. Poiré comentó que el uso hotelero exige características de resistencia más elevadas, sobre todo en las telas, ya que la frecuencia de lavado es más alta. “Es un uso muy rudo, la gente se sienta en grupos, hay un constante movimiento

sobre los muebles, por lo que su construcción es más robusta y los espesores más anchos. Lo recomendable son los plásticos, la madera, cierto tipo de aluminios, acero inoxidable y ciertos metales recubiertos con material epóxico, de gran resistencia al sol, a la lluvia y a la salinidad que provoca oxidaciones”, dijo Poiré. Ya sea hotel o casa habitación, se puede hablar de tres áreas donde son colocados los muebles: en interiores, en terrazas cubiertas pero en el exterior y los expuestosal sol totalmente.

La calidad tiene su precio

Como todo lo bueno, tener un sillón de madera que dure varios años en su casa de playa tiene un costo muy alto. Pero si no desea casarse con un estilo determinado y que le dure año y medio, como máximo, para poder cambiarlo, existen los nuevos plásticos, los aceros inoxidables y vidrios resistentes.

“Normalmente, las cosas de calidad las manejan los profesionales que trabajan en marcas como Royal Botania de Bélgica, Kettal de España, y Dedon. Cuentan con opciones de madera con acero inoxidable, madera con aluminio, las mesas son extensibles y originales sombrillas que han sido copiadas por la competencia”, dijo el experto de Mobles & Architetture.

Dijo que en el mercado hay de todo, desde lo más barato (1,500, 2 mil o 10 mil pesos), hasta lo que encuentras en Royal Botania o Dedon, que cuestan varios miles de dólares.“Una de las mejores sillas inglesas de teca cuesta alrededor de 10 mil euros; aunque también hay sillas de 1,200 o 1,500 dólares que están bien hechas y duran mucho tiempo”, expresó. Gracias a la tecnología aplicada en plásticos y demás materiales, como las nuevas fibras, hay muebles de plástico que ofrecen una garantía de alrededor de 10 años y, si se preocupan por mantenerlos en buenas condiciones y los cuidan, primero se aburren del mueble antes que le pase algo.

Si una persona desea amueblar una terraza de 10 por 10 metros cuadrados con muebles que duren dos años, y que sabe que los va a tirar, le saldría entre 4 y 5 mil dólares, y le incluye una sala, comedor, sillas y camastros. O puede salirle entre 35 mil o 40 mil dólares con lo mejor que existe en muebles.

Saber elegir

Cuando decoramos nuestro hogar ponemos empeño en elegir lo mejor para los sitios que consideramos más sociales o íntimos, como la sala o recámara, y dejamos al último, o a veces ni nos preocupa, cómo amueblar nuestro espacio exterior o al aire libre. Depende de qué es lo que se quiere, para qué y qué tanto lo va a usar, sin olvidar que la persona que lo atiende debe de ser honesta y profesional para que lo oriente en lo que busca.

“Cuál es el destino del espacio, de la terraza, si tiene alberca o no, si es para leer o desayunar o si planea hacer ahí toda su actividad, como desayunar, comer,cenar y descansar. Lo podemos sintetizar en función y gusto, donde entra el estilo”, señaló Genaro Guerrero.

Todo tiene un común denominador: intemperie, es decir, lluvia, sol, salinidad o no, polvo, va a estar al aire libre o bajo una sombra, agregó. No es lo mismo, prosiguió, el comedor de una terraza de Acapulco que se va a utilizar todo el tiempo y que vale la pena invertir en ella porque se va a pasar mucho tiempo ahí conviviendo con la familia, que una terraza en Contadero o Santa Fe, que no le pega el sol aunque esté al aire libre, pero no tiene las mismas condiciones de la anterior. Además, el dueño se puede aburrir de los muebles en dos años y va a comprar otra cosa. Son terrazas las dos, se va a vivir ahí pero las necesidades son diferentes.

Poiré complementó diciendo que hay que considerar su utilización, dónde van a estar y asegurarse que cumplan con las especificaciones de construcción y sean los materiales indicados para que puedan obedecer al uso deseado y que su inversión esté garantizada, no solamente por una temporada sino por muchos años. No hay que olvidar, dijo Marisabel Gómez Vázquez, que consultar a un experto es lo mejor y no es lo más oneroso, porque lo más caro es equivocarse y volver a gastar.

CUIDADOS IGUAL A MAYOR DURACIÓN

En la playa, todo el mundo quiere divertirse, descansar, no les preocupa cuidar los muebles, por eso los fabricantes los hacen de gran resistencia para que la gente no se preocupe por cuidarlos en extremo. Hay personas que piensan que un mueble después de estar expuesto al clima debe seguir igual, que no le pase nada, pero lo que no saben es que hay materiales que se oxidan o que cambian de color o presentan ciertas fisuras, y por ello los muebles sufren un cambio.

De acuerdo con los entrevistados, los cuidados dependen del mueble que uno elija, del material del que esté hecho, y aunque todos los materiales resisten las inclemencias del tiempo, hay que considerar los siguientes consejos que dan los expertos, porque son de gran utilidad. Materiales como la madera tienen una gran variedad de grasas y ceras para su mantenimiento, puede protegerlos con aceite de teca por lo menos una vez al año, para que los muebles no pierdan color y no se resequen demasiado.

Y a menos que realice una fuerte inversión en comprar los costosos muebles de teca, la forma más fácil de proteger los muebles de madera es aplicándoles barniz o pintura al agua después de adquirirlos. Cerciórese de que la etiqueta del producto que usará para revestir la madera le indique cuántas veces deberá repetir el tratamiento inicial. Las fibras naturales, como ratán, caña o bambú, deben protegerse de la lluvia y del sol directo, y limpiarse con un paño húmedo. Pueden barnizarse y teñirse con barnices de poliuretano para hacerlos más resistentes a la humedad y al sol.

Como la superficie del mimbre tejido tiene gran cantidad de grietas, que pueden contener y mantener la tierra y el polen, es importante realizar una profunda limpieza periódica. Los muebles de resina o de plástico de calidad resisten muy bien a la intemperie y se limpian fácilmente con agua y jabón. Lo único que debe considerar al comprar muebles de plástico u otros materiales sintéticos es preguntar si se decoloran por el sol. Mientras que los de aluminio no dan problemas si están al aire libre, ya que con un trapo húmedo bastará para que se vean perfectos.

Al tener los muebles un sentido de mayor duración, que no son como la ropa que se cambia cada temporada, son una inversión importante, por lo que hay una preocupación en que estén bien construidos. Y es mejor gastar un poco más al inicio si con ello se asegura que no tengan un ciclo de deterioro más rápido, porque es más probable que algo que cueste poco también dure poco. Sin duda, en gustos se rompen géneros, pero en presupuestos también. Por ello, lo más importante en muebles de playa y exteriores es la gran diversidad de oferta para todoslos presupuestos, tanto de productos nacionales como importados.