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Tras superar la pandemia, los puestos administrativos mantendrían la modalidad mixta, pero no los referentes a ventas, atención al cliente y operaciones.

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Con miras a establecer una ‘nueva normalidad’ en Perú, un estudio reveló que el 70% de las empresas grandes seguirá con el trabajo remoto luego de superada la pandemia derivada del nuevo Coronavirus, mientras que el 27% aún no lo ha decidido y el 3% descartó esta posibilidad, pues el giro de negocio lo hace imposible.

Así, 64% de las firmas indicó que aplicará el trabajo remoto, al menos tres días a la semana, pero no lo haría igual para todos los empleados. Aunque el 93% de los puestos administrativos mantendría la modalidad mixta, este porcentaje se reduce en puestos de ventas (29%), atención al cliente (22%) y operativos (10%).

Los resultados del informe ‘Retorno laboral y la nueva normalidad’, elaborado por Marsh, indicaron que las compañías analizan el retorno a los espacios de trabajo convencionales, asimismo, que esta modalidad fue bien recibida en el país.

Para Akio Murakami, gerente central de Salud y Beneficios de Marsh, “al margen del marco normativo que exista, las empresas están armando su propio espacio. Y, en esta línea, el trabajo remoto llegó para quedarse”. Siempre que el concepto de este trabajo no se altere y contemple la confianza hacia los colaboradores y el respeto de los horarios.

Para la ejecución de este esquema laboral, el principal reto que se enfrentó fue la habilitación de la infraestructura tecnológica, ya que no todas las compañías tenían los accesos al VPN, que permite conectarse a las plataformas de la empresa.

Cabe destacar que 46% de las empresas ha aplicado medidas relacionadas a la gestión de la salud mental. Sin embargo, Murakami acotó que deben realizarse mayores trabajos en este campo, debido a que la mezcla del horario de trabajo con el de casa genera estrés y ansiedad en los empleados.

En opinión de César Puntriano, profesor de la Maestría en Finanzas y Derecho Corporativo de la Universidad ESAN, indicó que corresponde mejorar la normativa del teletrabajo, pues no tiene caso tener dos marcos casi similares; y que hoy contempla más obligaciones para el empleador.

/Con información de El Comercio/