En un contexto donde la sostenibilidad se ha convertido en un criterio esencial del desarrollo urbano, Zaha Hadid Architects presenta Symphony Tower, un rascacielos residencial que redefine la relación entre diseño, eficiencia energética y adaptación climática en Dubái.
La torre se envuelve en una celosía tridimensional iluminada, cuyo diseño retoma las geometrías y el detallado bordado del patrimonio artesanal local. Este exoesqueleto no solo caracteriza visualmente al edificio: también funciona como sistema de sombreado, reduciendo la ganancia solar directa y permitiendo que los departamentos mantengan temperaturas más estables.

Diseño modular y materiales de bajo impacto
Symphony Tower se construirá mediante un método modular que utiliza acero reciclado y concreto de bajo carbono, lo que reduce de manera significativa el carbono incorporado. La base acristalada se eleva hacia una composición de 42 niveles que culminan en una piscina en la azotea y una serie de terrazas privadas al aire libre, protegidas por la geometría del exoesqueleto.

Consciente de los desafíos del entorno desértico, el proyecto incorpora reciclaje de aguas grises y paisajismo resistente a la sequía para disminuir la demanda hídrica. Estas medidas buscan establecer un equilibrio entre confort residencial y responsabilidad ambiental.
Paneles vidriados y tonos bronce envuelven la fachada para generar espacios interiores luminosos, mientras que los balcones salientes enmarcados por el exoesqueleto proporcionan sombra constante y áreas exteriores habitables durante gran parte del año, incluso bajo las altas temperaturas de Dubái.
