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La dirigente nacional de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA), Lizette Clavel, demandó una política de Estado en la que se establezcan las reglas que den viabilidad al sector aéreo del país
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Por Notimex CIUDAD DE MEXICO.- La dirigente nacional de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA), Lizette Clavel, demandó una política de Estado en la que se establezcan las reglas que den viabilidad al sector aéreo del país. En un mitin efectuado en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) llamó al gobierno federal que exija a los accionistas de las empresas que cumplan con las obligaciones contraídas en sus títulos de concesión, y subrayó: "demandamos imaginación, inteligencia y compromiso de los demás implicados". "Queremos definiciones y claridad en los planes de futuro, confiamos en que las autoridades pongan orden y establezcan a través de una política de Estado que se ocupe de la aviación, las reglas que den viabilidad a esta actividad", puntualizó. La dirigente de ASSA resaltó que la aviación es un sector estratégico para la competitividad y globalización de la economía nacional. Sin embargo, dijo, en esa actividad priva la incertidumbre y las amenazas de fusión, quiebra y desaparición de las empresas aéreas, recorte de los contratos, conflictos de carácter económico y desempleo. Por ello, exhortó a los trabajadores de tierra y pilotos a mantenerse unidos, "hagamos causa común en defensa del sector, de nuestros contratos colectivos y del empleo". Consideró que la crisis económica se ha extendido a las relaciones laborales, ya que se quebranta la contratación colectiva y se imponen criterios de manera unilateral. Clavel Sánchez señaló que se acusa a los trabajadores de irresponsables e inconscientes como si la historia fuera nueva y no hubiera futuro que construir. Agregó que ante los trabajadores y autoridades gubernamentales, los empresarios dicen estar al borde de la quiebra, pero frente a sus pares afirman tener compañías con alto valor y estar en posibilidad de comprarse la una a la otra. Este doble discurso, enfatizó, es inaceptable e inválido para hacer negocios. Sostuvo que los sobrecargos de aviación han sido testigos de la paulatina descomposición de la imagen y de las condiciones de la aviación civil, fenómeno que ha incidido negativamente en la relación de las empresas con sus trabajadores. Lizette Clavel añadió que los sobrecargos y los trabajadores de la aviación en general, no pueden seguir esperando a que la casualidad o la buena suerte resuelvan el destino de la aviación civil mexicana. "No aceptamos la falacia de que de nosotros depende que el problema se resuelva, porque ya hemos dado todo, como son prestaciones e ingresos e inclusive se ha sacrificado a trabajadores y las cosas van de mal en peor", alertó.