Con esta propuesta, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) prevé  una reducción en costo inicial de 4,534 mdd, obteniendo un ahorro de 52% en caso de ser válida la única propuesta.

Mediante el gasoducto de 800 kilómetros y con capacidad de 2,600 millones de pies cúbicos diarios, se establecerá conexión entre la región sur de Estados Unidos con Veracruz, así como con las ciudades de Altamira y Matamoros a través del uso de ramales. También interconectará con los gasoductos de Nueces-Brownsville y Tuxpan-Tula.

Este proyecto es el primero en su tipo y uno de los más grandes en infraestructura en México. Se espera comenzar sus operaciones comerciales en octubre de 2018.

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