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Directivos, personal, diseñadores, personal de recursos humanos y nuevos lineamientos, tendrán que están en sintonía para acomodarse al nuevo mercado corporativo.

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El segmento de oficinas en México y el mundo entró en una etapa mundial de reconfiguración. Los nuevos temas de conversación son la flexibilidad, movilidad, tecnología y ubicación, que serán factores que incidirán en las decisiones de los colaboradores en el regreso corporativo.

En este momento, el modelo tradicional de trabajo se transforma y en los países con mayor desarrollo tecnológico surge el modelo llamado Hub más Spoke, el cual deja de ser la oficina central y se empieza a convertir en un centro de reunión, donde se intercambian ideas, se labora, se da a conocer el equipo y donde se absorbe todo lo que es la imagen institucional y los valores de la empresa.

Cuando hablamos de Spoke, se refiere a cualquier lugar en el mundo, ya que la tecnología permite que las personas puedan trabajar desde cualquier parte.

 “El hecho de que se disuelva la barrera entre vida laboral y privada, empieza a generar muchos problemas y por otro lado necesita de sitios a dónde llegar a colaborar con su equipo y a veces el hecho de estar distantes o decir hoy me quedo a trabajar en mi casa y no pasa nada, también empieza a generar dificultades de organización”, precisó Iván González, director para el sector Oficinas de Newmark.

Agregó las oficinas todavía no están diseñadas para ser un espacio donde se quisiera estar, por lo que se considera que es el momento para replantear cómo deben ser y qué debe suceder dentro de ellas para que la gente prefiera ir a los espacios laborales que quedarse en su casa.

“Las organizaciones están cambiando. El enfoque del diseño de sus espacios se está transformando de ser corporate centric a user centric. El espacio tiene que estar habilitado no sólo para las necesidades del negocio, sino para la función que los usuarios tienen dentro de ese espacio. Tiene que haber un mix. Las personas van a la oficina porque existe un motivo para desplazarse a ella. Ya sea por necesidad de colaboración, ergonomía, confort, incluso la salud”, señaló por su parte María Valdez, directora de ventas y administración del cambio de Facility Management de la firma.

Durante la mesa “Teletrabajo y nuevos modelos de oficinas-esquemas híbridos de trabajo”, realizada en la Expo Real Estate 2021-México virtual.

Valdez añadió que el primer reto que enfrentan los diseñadores es la definición del programa espacial. Antes era bastante simple, ya que estimaban un espacio en función de los empleados que tenía la empresa, salvo algunas excepciones como las funciones de ventas que estaban en la calle.

El principal reto ahora será coordinar, entre empresas, clientes y despachos de diseño, cuántos espacios de trabajo se tienen que habilitar, lo que va de la mano con las definiciones internas de sus departamentos de recursos humanos, y directivos respecto a qué tan híbrido será el nuevo modelo de trabajo.

Smart building, no tan necesario

“Se puede abordar cómo hacer el espacio un lugar atractivo sin necesidad de invertir en un Smart building. Hay que aclarar con los usuarios por qué motivo tienen que ir a la oficina. Incluso, existe una mayor planificación en las agendas cuando los usuarios tienen que presentarse en el lugar de trabajo. Es decir, si ya voy a desplazarme, aprovecharé para ir a la tintorería, supermercado, hacer ejercicio, u otra actividad que se sume al desplazamiento. El confinamiento nos llevó a valorar más el tiempo invertido en desplazamientos y a generar”, apuntó Valdez.

Los especialistas consideraron que la flexibilidad y ubicaciones cerca de casa serán la tendencia post pandemia para seguir trabajando.

Expresó que la gente buscará flexibilidad en los espacios de coworking. Las empresas pueden trabajar desde un punto remoto, buscan reducir sus gastos operativos, van a buscar disminuir el espacio que actualmente tenían para 200 personas que las tenían ahí físicamente, ahora van a tener un espacio para 50 personas al día.

Otra de las tendencias será la de los nómadas digitales que no tienen obstáculos que les impidan estar trabajando desde cualquier parte del mundo, con niveles de eficiencia altos y una vinculación con el entorno o el barrio.