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Un informe de negocios estratégicos de Real Estate señaló que el mercado alcanzará los 4.7 billones de dólares para 2030, con jugadores como Aston Pearl Real Estate, CBRE Group, Dalian Wanda Group y Simon Property Group dominando el mercado.

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En el panorama comercial modificado posterior a Covid-19, se proyecta que el mercado global de bienes raíces estimado en 3.6 billones de dólares (bdd) en el 2022 alcance un tamaño revisado de 4.7 bdd para 2030, creciendo a una CAGR de 3.3% en el periodo 2022-2030.

Lo anterior se desprende del informe Real Estate: Global Strategic Business Report de ResearchAndMarkets.com y destacó también que el mercado de bienes raíces en Estados Unidos se estima en un billón de dólares en 2022-2030, mientras que se prevé que China crezca a una tasa compuesta anual del 5.1 por ciento.

 

Se pronostica que China, la segunda economía más grande del mundo, alcanzará un tamaño de mercado proyectado de 817 mil 700 mdd para el 2030 con una CAGR de 5.1% sobre el periodo de análisis de 2022 a 2030.

 

Entre los otros mercados geográficos destacados se encuentran Japón y Canadá, en donde se prevé para cada uno de ellos un crecimiento del 2.1 y el 2.7%, respectivamente, durante el periodo 2022-2030. Dentro de Europa, se prevé que Alemania crezca aproximadamente un 2.7% CAGR.

 

Mirando hacia el 2023

Una inflación minorista más alta afectará la confianza del consumidor y el gasto. “A medida que los gobiernos combatan la inflación elevando las tasas de interés, la creación de nuevos empleos se ralentizará y afectará la actividad económica y el crecimiento.

Se avecina un menor gasto de capital a medida que las empresas se retrasan en las inversiones, frenadas por las preocupaciones sobre la inflación y la demanda más débil”, indicó el documento.

 

 

Con un crecimiento más lento y una inflación alta, los mercados desarrollados parecen preparados para entrar en recesión. Los temores de nuevos brotes de covid y el ya incierto camino post pandémico de China plantean un riesgo real de que el mundo experimente un dolor más agudo en la cadena de suministro e interrupciones en la fabricación este año.

Los mercados financieros volátiles, las crecientes tensiones comerciales, el entorno regulatorio más estricto y la presión para incorporar el cambio climático en las decisiones económicas agravarán la complejidad de los desafíos que se enfrentan.

Se espera que el 2023 sea un año difícil para la mayoría de los mercados, inversores y consumidores. Sin embargo, siempre existe la oportunidad para las empresas y sus líderes que pueden trazar un camino a seguir con resiliencia y adaptabilidad.