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La constructora de vivienda Urbi que hace dos años enfrentó un proceso de reestructura, anunció que planea destinar entre 300 y 500 millones de pesos (entre 15.7 y 26.3 millones de dólares) al desarrollo proyectos inmobiliarios como parte de su perspectiva para 2018.

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La empresa con sede en Mexicali espera alcanzar niveles adecuados de caja para realizar estos proyectos de alta rentabilidad debido a sus cortos ciclos de operación, privilegiando el flujo de efectivo, informó Urbi en un comunicado enviado a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).

"El plan de negocio 2018 marca el inicio de una nueva etapa para Urbi con indicadores fundamentales en terreno positivo, de la mano de su estrategia de crecimiento gradual y ordenado, un cuidado estricto de su gasto y un capital humano experimentado, motivado y alineado a la consecución de sus objetivos estratégicos y a la generación sustentable de valor para sus inversionistas", informó Román Álvarez, director general de empresa constructora de vivienda.

La firma dio a conocer también que en su guía 2018, considera ingresos entre 1,400 y 1,500 millones de pesos (entre 73.6 y 79 millones de dólares), de los cuales, 90% provendrán de la venta de viviendas de proyectos propios e iniciativas de terceros, mientras que el 10% restante será por la venta de tierra para proyectos inmobiliarios y desinversión de activos no estratégicos.

Prevé que 75% de su capital de trabajo será financiado a través de créditos puente, mientras que 25% será fondeado con recursos propios y de firmas aliadas para cerrar 2018 con una deuda financiera de entre 600 y 700 millones de pesos (entre 31.5 y 36.8 millones de dólares), incluyendo el saldo de un crédito para finalizar infraestructura en proyectos anteriores.

Durante 2017 Urbi recuperó la confianza de los prestamistas, con la contratación de varios créditos puente para el desarrollo de proyectos, tras su concurso mercantil en el que cayó en 2015, motivado por la crisis que afectó el sector.