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El Banco Central de Reserva (BCR) del Perú elevaría 25 puntos base la tasa de interés a 7.75 por ciento.

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Para analistas de Perú, el Banco Central de Reserva (BCR) continuará realizando ajustes preventivos en su política monetaria, por lo que elevaría un 7.75% la tasa de interés, elevándola 25 puntos base.

En diciembre, la inflación alcanzó un 0.79%, por encima de la previsión (0.52%) del Departamento de Estudios Económicos de Scotiabank y del consenso del mercado (0.69%), para quedar en 8.46% anual.

La institución bancaria señaló que este ritmo estuvo por encima de su proyección inicial (7.7%) y de la proyección revisada (8.2%), así como por encima de la proyección del BCR (8.2%).

 

El riesgo de que persistan nuevos ajustes es latente, por lo que el nivel terminal de la tasa de interés aún es incierto.

 

Mario Guerrero, analista económico del banco, dijo que “al igual que nosotros, el BCR proyecta una tendencia a la baja en la inflación interanual.

“Y espera que la caída de la inflación sea más visible entre marzo y julio de 2023. Por lo pronto, esperamos una inflación interanual superior al 8% durante los meses de enero y febrero”.

Cabe recordar que el BCR señaló a fines del 2022 que el temor de los bancos centrales no es que la inflación no baje, sino que se quede estancada en un nivel muy alto, riesgo que se mantendría en enero y febrero.

En diciembre, la inflación se mantuvo por encima del límite superior de 3% de la meta de inflación por decimonoveno mes consecutivo, con lo cual es muy probable que se supere el período más largo con inflación superior al 3% en el pasado que fue de 21 meses.

 

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El BCR ve el riesgo de que este período de inflación por encima del límite de 3% sea el más largo de la historia, desde que se instituyó el rango meta de 1-3% en el 2007. Esto podría materializarse a partir de marzo.

La inflación de diciembre reflejó el impacto de protestas sociales y bloqueos de carreteras sobre los precios de los alimentos, principalmente de los perecederos como tubérculos y hortalizas.

También incidieron condiciones climáticas adversas, como la escasez de lluvias en las zonas productoras y el encarecimiento de los fertilizantes, de acuerdo con una publicación de Infobae.