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El aplazamiento e inconclusión de las obras en la supercarretera Durango-Mazatlán preocupan a la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), expresó el presidente de la dependencia, Francisco Ciceñas Prendes.

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En espera de gran afluencia por la vía en reconstrucción debido al próximo periodo vacacional, alarma que las obras aún continúen y con avances fuera de las especificaciones del proyecto original, que supone dudosa calidad.

El dirigente externó su molestia con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), donde considera que se privilegian a constructoras foráneas y que se han dejado fuera a las compañías de Durango: "Sabemos que en la SCT se toman decisiones afectando al gremio local".

Indicó que presentarán una propuesta ante la SCT para la resolución: "Vamos a exponer nuestros puntos de vista y demandar que se tome más en cuenta a los constructores duranguenses, poder llegar a acuerdos siempre respetando el marco legal y que haya la posibilidad de que exista equidad tanto en el número de obras como en las inversiones entre empresas de Durango y de otras partes del país".

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