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Entre abril y mayo de este año, disminuyeron drásticamente los permisos de construcción y el número de casas nuevas en el país.

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Census Bureau, la Oficina del Censo de Estados Unidos, dio a conocer que las nuevas construcciones en el país se desplomaron mucho más de lo proyectado por los analistas.

A su vez, el inicio de nuevas viviendas disminuyó por debajo de lo estimado por economistas por segundo mes consecutivo, lo que contribuiría a los síntomas de un cambio drástico en el mercado inmobiliario estadounidense, según datos publicados el 16 de junio.

 

Entre abril y mayo, el número de casas nuevas bajó un 14.4%, como lo indicó Forbes, y pasó de 1.8 millones a 1.5 millones de nuevas viviendas.

 

Por su parte, los analistas consideraron que los inicios de viviendas estarían alrededor de 1.7 millones para esas fechas, de acuerdo con una publicación de bitfinanzas.com

Respecto a los permisos de construcción, también descendieron más allá de lo pronosticado; información de Census Bureau señaló que disminuyeron a 1.7 millones el mes pasado. Economistas estimaron que se mantendrían alrededor de los 1.8 millones desde abril.

Una explicación de la inesperada disminución de la construcción de nuevas viviendas sería por la caída abrupta de las ventas, que afecta a los constructores, mencionó a Forbes Ian Shepherdson, líder de la firma Pantheon Macro.

Además, dijo, desde inicios del año pasado, se construyeron viviendas en exceso con la intención de cubrir la demanda misma que ha disminuido rápidamente.

Y para evitar enormes pérdidas, opinó el economista que los constructores deben ralentizar la construcción de nuevas viviendas.

 

 

Hoy en día, se están dando las primeras etapas de la renovación de la vivienda, indicó Shepherdson. Agregó que en la medida que las tasas de interés se sigan incrementando en EU, próximamente se verán bajas más bruscas en el inicio de nuevas viviendas ya que se encarecerá la compra de las mismas y caerá la demanda todavía más.

La caída de los mercados bursátiles también ha afectado al sector inmobiliario estadunidense, como en el caso de Masco y Owes Corning, empresas de la construcción de viviendas cuyas acciones cayeron más de 4 por ciento.