La depreciación del peso frente al dólar ha generado efectos variados en diversos sectores, algunos positivos y otros menos favorables.
El desempeño registrado a noviembre de 2015 estuvo por debajo de las expectativas; sin embargo, hubo un avance moderado en relación al mismo periodo de 2014.
El ajuste al presupuesto federal de 2015 y la previsión de 2016 afectó a diversos proyectos de infraestructura que incluso fueron cancelados a principios de 2015.
El desarrollo de infraestructura tiene un gran impacto global, pues se convierte en un motor importante de crecimiento social y económico, principalmente en el mundo de los negocios inmobiliarios.
El precio de las casas de lujo ha mostrado durante años un crecimiento sólido a nivel internacional.